sábado, 5 de noviembre de 2011

Mi sobrino y su Virgen de Gracia

Hace dos años y cuatro meses, un ser muy querido para mí, el hijo de una de mis hermanas, sufrió un derrame cerebral que estuvo a punto de arrancarle la vida con apenas 25 años. Estuvo rozando la muerte de la que se libró por puro milagro.

Este sobrino mío es un gran devoto de la Virgen de Gracia de Úbeda (Jaén). De hecho era costalero de dicha Virgen portándola y procesionándola todos los Lunes Santos hasta que le sobrevino la hemorragia cerebral a que me he referido anteriormente.

 Para él no existe la más mínima duda que su curación se debió a la intercesión de su amada Virgen de Gracia. La verdad es que estuvo tan cerca de la muerte y su recuperación ha sido tan extraordinaria que incluso yo he pensado a veces si no estuvo la mano de su Virgen detrás de todo ello.

 Sea como fuere, lo cierto es que en más de una ocasión, mi sobrino me ha pedido que escriba alguna entrada sobre la Virgen de Gracia, yo, que tanto lo quiero, no puedo desoír su petición y a modo de homenaje le voy a dedicar estos dos poemas que escribí hace tiempo.

 El primero trata sobre las sensaciones, subjetivas, que se perciben la noche del Lunes Santo al ver procesionar la cofradía por las calles de Úbeda. El segundo es la historia de un milagro, que bien podría extrapolarse a lo acaecido a mi sobrino.

Sin más dilación, aquí os dejo estos dos poemas que, si no os importa, son un regalo para mi querido sobrino:

VIRGEN DE GRACIA
La noche del Lunes Santo,
al tronar de una llamada,
las puertas del templo se abren,
sale la Virgen de Gracia.

Al compás de costaleros,
entre vítores y palmas,
traspasada ya la puerta,
¡hasta el cielo la levantan!

Dos hileras de cofrades
por las calles la acompañan,
tambores y timbalinas
rompen el silencio y la calma.

La negra noche se llena
de suspiros y plegarias,
de luces y de misterio,
de perfumes y fragancias.

De músicas melancólicas,
de soledad y esperanza,
de olor a cera y a incienso,
de aroma de flores blancas.

De penitentes descalzos
que pidieron por su alma,
y llevan la penitencia
de las promesas lejanas.

Del sabor de una saeta
que resuena en la garganta,
manantial de sensaciones
que en el aire se derraman.

Con un aura de misterio
el trono en silencio pasa,
y arranca de lo más hondo
emociones y palabras;

palabras de amor que nacen
en el fondo de mi alma,
al ver pasar la Señora,
Nuestra Señora de Gracia.

PLEGARIA A LA VIRGEN DE GRACIA 
 Postrada de hinojos
Señora de Gracia,
ya estoy a tu lado
como esta mañana.


A pedirte vengo
con fe y esperanza,
remedio a un problema
que acucia mi alma,
y al que no le hallo
soluciones claras,
para que a mi vida
regrese la calma.

Mi niño pequeño
enfermo está en cama,
su infantil alegría
se fue de su cara,
sus ojos, muy tristes
me miran y hablan,
pidiéndome ayuda
y yo, destrozada,
no encuentro consuelo
que darle a su alma,
y lloro en silencio
perdida en la nada.

Al ver mi tristeza
ayer, mis hermanas,
dijeron que rece
a la Virgen de Gracia,
la que el Lunes Santo
caminan en andas,
por calles estrechas
poco iluminadas.

Por eso he venido
Señora de Gracia,
a llenar de flores
tu figura blanca
y a pedir que la dicha
regrese a mi casa.

¡Que vuelva a mi niño
su sonrisa clara!,
¡que vuelva a besarme
cuando despertaba
y diga mamá
con su voz de plata...!

Pasaron los días
y a las dos semanas,
para mi alegría
mi niño sanaba.

Volví a la Señora
y le di las gracias,
llevando a mi hijo
que ya caminaba.

¡Aquí está mi niño
Señora de Gracia,
le has dado la vida
que se le escapaba!

Miré a la Señora,
repetí las gracias,
de la alta torre
sonó la campana…

Entrando en el templo,
con alas de nácar,
una mariposa
revoloteaba.

¡Esta es la respuesta
pensé, a mis plegarias!,
alzando los ojos
a la Imagen Santa.

Y llegó hasta mí,
cual si me escuchara,
de flores hermosas,
la rica fragancia.

Marco Atilio




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6 comentarios:

eltodopoderoso dijo...

Muchas GRACIAS por este gesto tan bonito será imposible de olvidar jamás.
Solo puedo decir que los milagros a veces, (no siempre por desgracia) existen de verdad y que la fe de uno es capaz de mover esas montañas que a veces no somos capaces de saber cómo salir de ese apuro tan grande en el que la vida nos mete.
Si es cierto o por lo menos eso pienso yo, que mi Virgen (que es la de todos y nos protege a todos) siempre ha estado en todo momento a mi lado porque de no ser por ella y las buenas manos de ese medico yo no estaría aquí y de la forma en la que estoy con mis cosas, que así las llamo yo pero, bueno no me puedo quejar.
Como dice la poesía yo cuando estuve algo recuperado me fui hacia ella y le di las gracias por todo pero, no se las di como cualquiera se las puede dar a alguien sino de una forma muy especial en que dos lagrimas muy grandes se me cayeron por mi rostro.
Solo puedo decir GRACIAS por apoyarme toda mi familia y a mi mujer y por este bonito gesto por parte de mi tío.

Al Legonab Alîm Akram deUbadzza dijo...

Me alegro por tu sobrino y toda su familia, fue obsequiado por la Virgen con la Gracia de una recuperación a todas luces milagrosa.
A mi modo de ver, la de tu sobrino, es una de las muchas intervenciones donde se muestra la beneficiosa intervención de la Virgen en la vida de todos sus devotos, porque es una Madre afectuosa, que se preocupa por sus hijos, de sus dolencias, problemas y apuros, que está siempre dispuesta a escucharnos y a darnos aliento, en los momentos difíciles.
La advocación mariana, de la Virgen de Gracia tiene su origen en la frase que el Arcángel San Gabriel dijo a María el día de la Anunciación:"Dios te salve María, llena eres de Gracia".

La Picapleitos dijo...

La fe puede mover montañas, creo que si se tiene fe te ayuda a vivir y puedes afrontar los problemas con más seguridad. Me congratulo que tu sobrino se recuperara. Un bonito gesto este post con los dos poemas que, personalmente, me han encantado. Decirle a eltodopoderoso que se ve que es tu sobrino, que me alegro por haber salido de una prueba tan dura como la vida puso en tu camino. Desde luego con la extraordinaria fe que tienes en tu querida Virgen de Gracia seguro que las cosas te irán bien. Yo no es que sea muy creyente, supongo que debe haber algo que escape a nuestros sentidos y que de alguna manera influya en todo lo que nos rodea. No lo sé, aunque tampoco lo desmiento. Me gustaría tener la fe que tienes eltodopoderoso, seguramente algunas cosas me hubieran salido mejor a lo largo de mi vida. Muy bueno el post Marco Atilio y bonito gesto el que has tenido hacia tu sobrino.

xiqueteta dijo...

fue un verdadero milagro, ya que cuando todas las esperanzas se perdian por parte de los medicos fue la virgen la que ayudo en aquel momento para que todo saliera bien y se dieran una serie de circustancias que le devolvieron la vida.

The Black Mamba dijo...

¡Que bonito! Sin duda uno de los momentos más tristes y a la vez más felices de nuestra vida, primero con el maldito derrame que casi acaba con la vida de mi primo y después con la milagrosa recuperación, desde aquí un besazo fuerte a mi primo y gracias a "su virgen" por lo que hizo y a mi padre enhorabuena por el blog porque es una maravilla y por estas dos poesias que son preciosas.

Pueblerina dijo...

Triste historia con un final maravilloso. Preciosos poemas. Felicidades.