sábado, 3 de septiembre de 2011

Alegría

La Alegría, es un estado interior lozano y radiante que genera una sensación de bienestar general,  es estar lleno de felicidad, paz, amor y una percepción  de ser amado, es apreciar el don de la vida que puede ser percibida en toda persona, siendo así que quien la experimenta, la revela en su aspecto, en sus actitudes, en su forma de hablar, en sus determinaciones y en sus hechos.




Alegría  es…

mirarla a los ojos y  ver de nuevo el brillo del amor que antaño brotaba de sus pupilas.

Alegría  es

ver pasar los días y darme cuenta de que realmente, el amor dura para siempre y más si el paradigma que tengo es el de su propio amor.

Alegría  es

que mi satisfacción  lleve su voz, su cuerpo, su cara.

Alegría  es

volver a recibir casi siempre más de lo que he dado.

Alegría  es

desear la tranquilidad, la armonía y el amor y obtenerlo todo con solo volver a tenerla.

Alegría  es

saber que mi felicidad no depende de su estado de ánimo.

Alegría  es

saber que la mujer que amo esta venciendo a esa envoltura de alienación.

Alegría  es

estar acompañado aún estando solo .

Alegría  es

saber lo que es amar y volver a  ser amado.

Alegría  es

dar todo mi amor, toda mi alma y todo mi ser con total  desinterés y que no se quede ahí, atrapado en el éter, porque ella vuelve a ser  capaz de apreciarlo.

Alegría  es

ser capaz de dar la vida misma por ella y que ella sea capaz de luchar por tenerme en su pensamiento.

Alegría  es

que mi corazón la llame a gritos y ella esté aquí para calmar su soledad.

Alegría  es

que la persona que más me puede hacer sufrir, es la que precisamente más me hace feliz.

Alegría  es

sentir  felicidad y tener con quien compartirla.

Alegría  es

querer a una persona y que ésta comparta contigo ese mismo sentimiento.

Alegría  es

que la única persona que puede provocar mi llanto, es la que  hace que deje de llorar.

Alegría  es

navegar en el sabor de la felicidad, sentir como mi alma es atravesada por una infinita ventura y quedarme aquí, con ella, envuelto en claridad y risas.

Alegría  es

saber  que ella ha creado el peor de los infiernos: ¡el Mío! y ver que ha sido capaz de destruirlo colmándome de júbilo y alborozo .

Alegría  es

saber  que ella está intentando restituir lo más precioso que aun me quedaba: ¡Mi Esperanza!

Alegría  es

que la dicha sea la encargada de decirme cada día, que estoy preparado para seguir viviendo aquí.

Alegría  es

esforzarme para hacer las cosas bien, teniendo la ilusión,  de que esos esfuerzos ella los percibe en tan sólo unos segundos.

Alegría  es

sentir que la felicidad me fortalece el alma, el deseo de vivir, el deseo de soñar, me hace valioso y me envuelve en una armonía sin fin.

Alegría  es

hablarle y  saber que decirle, es entonces cuando me invade una gran esperanza.

Alegría  es

saber que la quiero y la he vuelto a encontrar.

Maldita alienación... 

has perdido contra mi amada, tú no eres ella, ella lo es todo, tú no eres nada.




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2 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Ojalá te dure por siempre esa alegría y esa felicidad! ¡Ojalá te sepan dar la alegría y la felicidad que tú mereces! ¡Ojalá nunca más seas presa de la melancolía y la depresión! ¡Ojalá encuentres de una vez el sosiego con la persona amada y luzca de una vez el equilibrio y la estabilidad en aquello o aquellos que te pueden hacer el hombre más feliz del mundo, aunque (y Dios no lo quiera) también el más desdichado. Hago mía tu felicidad y tu contento que se manifiesta en tu bello y poético artículo.

Anónimo dijo...

Gracias por hacerme participe de tu amistad.
Gracias por tus palabras de ánimo.
Gracias por tu apoyo ilimitado.
Gracias por el consuelo otorgado.
Gracias por compartir mis penas.
Gracias por compartir mis alegrías.
Gracias por tus buenos deseos.
Y sobre todo, Gracias por ser mi amigo.